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La Iglesia de Inglaterra rechaza la ordenación de las mujeres como obispos

  • El Sínodo general no logra alcanzar la mayoría necesaria de dos tercios
  • La propuesta no ha salido adelante solo por seis votos de diferencia
  • Un tercio de los 11.000 clérigos anglicanos en Inglaterra son mujeres

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La Iglesia de Inglaterra ha rechazado la ordenación de mujeres obispos tras años de un intenso debate entre el sector conservador y el reformista, lo que abre un nuevo período de división en el seno de la comunión anglicana.

El Sínodo general de la Iglesia de Inglaterra reunido en Londres no ha conseguido aprobar, por solo seis votos de diferencia, una propuesta que protagoniza su agenda desde que hace 20 años se permitiera la incorporación de las mujeres al sacerdocio.

En la actualidad, un tercio de los 11.000 clérigos anglicanos en Inglaterra son mujeres pero éstas seguirá sin poder optar a los puestos más altos de la jerarquía de la que es gobernadora suprema la reina Isabel II.

La votación no consigue los dos tercios necesarios

A pesar de que la propuesta ha contado con el apoyo mayoritario del Sínodo, no ha logrado los dos tercios necesarios en la cámara de los laicos, donde 74 votaron en contra y 132 miembros votaron a favor.

Entre los obispos, sin embargo, los sufragios favorables fueron 44 frente a solo 3 en contra y entre los clérigos hubo 148 votos a favor y 45 en contra.

El resultado, muy ajustado como se preveía, ha sido acogido con lágrimas por algunos participantes en el Sínodo y calificado de "decepcionante" por los grupos reformistas que apoyaban la propuesta, a la que se oponían fervientemente los sectores más tradicionalistas.

De nada sirvió el apoyo explícito tanto del actual arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, como de su sucesor, Justin Welby, que asumirá su cargo en enero, que defendieron abiertamente la ordenación de mujeres obispos durante sus discursos ante los 468 miembros de la Iglesia de Inglaterra con derecho a voto.

Los analistas aseguran que el resultado de esta votación cuestiona la autoridad del nuevo jefe espiritual de los anglicanos, conocido por su carácter conservador aunque pragmático, y abre un nuevo periodo de división y enfrentamiento en la Iglesia de Inglaterra.

Las mujeres, lejos de la jerarquía anglicana

La opción de ver a mujeres en los puestos más altos de la jerarquía anglicana en Inglaterra, que apoya la mayoría de los fieles, se aleja ahora al horizonte de 2019, cuando en principio sería posible votar de nuevo sobre el asunto tras un largo proceso legislativo.

El grupo "The Women and the Church" (las mujeres en la Iglesia), que lleva años haciendo campaña a favor de la medida, ha calificado el rechazo de hoy como "un golpe devastador para la Iglesia de Inglaterra y la gente de este país".

Mientras que los reformistas defendían la medida como una consecuencia lógica de la incorporación de la mujer al sacerdocio y la igualdad entre géneros, los que se oponen la califican de aberración teológica.

Los tradicionalistas recuerdan que Jesús eligió solo hombres entre sus apóstoles por lo que creen que el liderazgo de la Iglesia debe recaer en los varones.

Además, los denominados anglo-católicos argumentan que ordenar mujeres como obispos alejaría su pretensión de unirse a los católicos de Roma.

Años de debate

Durante años, la jerarquía anglicana ha ido posponiendo la conflictiva votación por miedo a que la medida reformista pudieran suponer un cisma en el seno de la Iglesia.

De hecho, el asunto ha hecho que muchos anglicanos hayan manifestado su intención de abandonar esta Iglesia para unirse a la comunión católica, algo que han llegado a hacer varios obispos.

Coincidiendo con la visita de el Papa Benedicto XVI al Reino Unido en septiembre de 2010, la Santa Sede anunció la creación de la Ordenación Personal en Inglaterra y Gales para los fieles anglicanos que quieran abrazar la comunión católica ante su oposición por las medidas demasiado aperturistas de los anglicanos.

Entre la comunión anglicana alrededor del mundo existen ya 23 mujeres obispos en activo en Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Estados Unidos y Suiza.