"Los Siete Santos Durmientes de Éfeso", Padre Jesuita Martín de Roa.
Durante la terrible persecución de los cristianos del Emperador romano Decio, 7 hermanos mancebos se escondieron en una cueva cercana a la comunidad de Éfeso. Los ministros de Decio los siguieron hasta ahí y taparon la entrada de la cueva con piedras y lodo para que murieran y así escarmentaran los demás cristianos. Los 7 mancebos al verse perdidos se encomendaron a Dios, al momento Dios les envió un suave sueño que duró varios siglos... hasta que fueron despertados en otra época, siglos después reinando el piadoso Emperador romano Teodosio III...grata sorpresa de Dios para convencer a los Herejes que negaban la Resurrección de los muertos en el día del juicio final.
Para leer el Texto escrito del Padre Jesuita Martín de Roa, de su Libro: "Estado de los Bienaventurados en el Cielo", de la milagrosa protección que Dios dio a 7 hermanos mancebos perseguidos durante la terrible persecución de los cristianos del Emperador …More

"Recibió el don de hablar toda lengua y fin muy espantoso", Relato escrito del Papa San Gregorio Magno en su libro: Diálogos..
Un mozo vaquerizo de gran simpleza y humildad trabaja en casa del abogado romano Valeriano, en el año 590 D.C. Una gran epidemia azota la ciudad de Roma y muere mucha gente, la casa de Valeriano es afectada y muchos mueren por la peste. El mozo vaquerizo enferma y acercándose la muerte es llevado al cielo. Al poco tiempo vuelve en si e informa a su Señor Valeriano que había ido al Cielo y que iban a morir varios de su casa, da los nombres. Para que creyera su Señor, le dice que había ido al cielo, que allí había recibido el don de hablar toda lengua de la Tierra. Para comprobarlo, Valeriano le habla en Griego y contesta para gran asombro de los presentes. Un escudero Búlgaro le habla en su lengua nativa y le contesta como si el hubiese nacido y crecido en ella. Ya le creen... puede hablar toda lengua. Pero, pasados tres días el mozo vaquerizo se despedazó lo …More

"Recibió el don de hablar toda lengua y fin muy espantoso", Relato del Papa San Gregorio Magno.
Un mozo vaquerizo de gran simpleza y humildad trabaja en casa del abogado romano Valeriano, en el año 590 D.C. Una gran epidemia azota la ciudad de Roma y muere mucha gente, la casa de Valeriano es afectada y mucho mueren por la peste. El mozo vaquerizo enferma y acercándose la muerte es llevado al cielo. Al poco tiempo vuelve en si e informa a su Señor Valeriano que había ido al Cielo y que iban a morir varios de su casa, da los nombres. Para que creyera su Señor, le dice que había ido al cielo, que allí había recibido el don de hablar toda lengua de la Tierra. Para comprobarlo, Valeriano le habla en Griego y contesta para gran asombro de los presentes. Un escudero Búlgaro le habla en su lengua nativa y le contesta como si el hubiese nacido y crecido en ella. Ya le creen... puede hablar toda lengua. Pero, pasados tres días el mozo vaquerizo se despedazó lo brazos con sus dientes y murió. …More

"Dios le mostró la eternidad, maravilloso ejemplo del Cielo", del P. Jesuita Martín de Roa.
Un santo monje pidió a Dios comprender la frase "Mil años a vuestra vida, son Señor, como un día que pasó ayer". Entonces, Dios le concedió comprenderla por medio de un maravilloso instante en un bosque cercano, estuvo probando la suavidad eterna aquí en la tierra, pero al regresar al convento ya habían pasado 300 años.

"... juzgará a vivos y muertos", Art. 7 del Credo de los Apóstoles, exp. por San Tomás Aquino.
Nuestro Señor Jesucristo ha sido constituido por Dios Juez de vivos y muertos. Como Rey de toda la creación, dueño de todo lo existente, Jesucristo es Señor. Como Hijo de Dios y Dios con el Padre Celestial, en el Espíritu Santo, lo sabe todo, lo puede todo, lo oye todo, nada escapa a su escrutinio, las acciones e intenciones más secretas de los hombres están ante Jesucristo. Como Juez Divino, Jesucristo juzga a todos los hombres que mueren, ni un solo hombre que muere en el mundo escapa de su santo Juicio, somos juzgados por Él por el amor que tuvimos a Dios y a nuestro prójimo. Jesucristo será el que juzgue a todos lo hombres en el Juicio Universal. Después de que todos los hombres sean resucitados por el poder de Dios, serán apartados por los ángeles de Dios: los hombres buenos a la derecha de Jesucristo, los hombres malos y pecadores a la izquierda. Ya no habrá misericordia en ese día, no …More

"... juzgará a vivos y muertos", Art. 7 del Credo de los Apóstoles, exp. por San Tomás Aquino.
Nuestro Señor Jesucristo ha sido constituido por Dios Juez de vivos y muertos. Como Rey de toda la creación, dueño de todo lo existente, Jesucristo es Señor. Como Hijo de Dios y Dios con el Padre Celestial, en el Espíritu Santo, lo sabe todo, lo puede todo, lo oye todo, nada escapa a su escrutinio, las acciones e intenciones más secretas de los hombres están ante Jesucristo. Como Juez Divino, Jesucristo juzga a todos los hombres que mueren, ni un solo hombre que muere en el mundo escapa de su santo Juicio, somos juzgados por Él por el amor que tuvimos a Dios y a nuestro prójimo. Jesucristo será el que juzgue a todos lo hombres en el Juicio Universal. Después de que todos los hombres sean resucitados por el poder de Dios, serán apartados por los ángeles de Dios: los hombres buenos a la derecha de Jesucristo, los hombres malos y pecadores a la izquierda. Ya no habrá misericordia en ese día, no …More

"Estado de los Condenados en el Infierno", Texto escrito por el Padre Jesuita Martín de Roa.
Dios, en su justa ira, diseño el infierno para Satanás y sus demonios, después de la rebelión de Lucifer y sus seguidores en el cielo. Por lo tanto, el Infierno es justo e inmutable. Si Adán y Eva no hubiesen cometido el pecado original, bien pudieron hacerlo si hubieran obedecido, todos sus descendientes hubieran ido al Cielo después de vivir un tiempo en la tierra. Pero, por el pecado original entró al mundo la enfermedad y la muerte, ahora todos irán al Infierno a hacerle compañía a Satanás y sus demonios. Hasta que Jesucristo reconcilie al hombre con su Padre Celestial y el que quiera seguirlo, aprovechando los méritos infinitos del Hijo Único de Dios, podrá ir al Cielo. Pero, no todos se convierten y conocen a Dios y su Cristo, esos son presa del demonio. El alma del réprobo es conducida al Infierno inmediatamente después del Juicio Particular, en el que el Justo Juez dicta la sentencia de …More

"Estado de los Condenados en el Infierno", Por el Padre Jesuita Martín de Roa.
Dios, en su justa ira, diseño el infierno para Satanás y sus demonios, después de la rebelión de Lucifer y sus seguidores en el cielo. Por lo tanto, el Infierno es justo e inmutable. Si Adán y Eva no hubiesen cometido el pecado original, bien pudieron hacerlo si hubieran obedecido, todos sus descendientes hubieran ido al Cielo después de vivir un tiempo en la tierra. Pero, por el pecado original entró al mundo la enfermedad y la muerte, ahora todos irán al Infierno a hacerle compañía a Satanás y sus demonios. Hasta que Jesucristo reconcilie al hombre con su Padre Celestial y el que quiera seguirlo, aprovechando los méritos infinitos del Hijo Único de Dios, podrá ir al Cielo. Pero, no todos se convierten y conocen a Dios y su Cristo, esos son presa del demonio. El alma del réprobo es conducida al Infierno inmediatamente después del Juicio Particular, en el que el Justo Juez dicta la sentencia de condenación …More

"De las almas de Salomón, Sansón, Orígenes y Trajano", Revelación de S. Matilde de Hackeborn.
A petición de un monje, Santa Matilde hace varias preguntas a Nuestro Señor Jesucristo acerca del destino que tuvieron algunos personajes de la Biblia como Salomón y Sansón, el Padre de la Iglesia oriental: Orígenes y el Emperador romano Trajano, que expandió al máximo el Imperio romano. Nuestro Señor con todos ejerció su misericordia, su bondad y liberalidad. Además, de ellos señala algunas situaciones o características que la gente debe evitar, porque sin la ayuda de Dios su destino es la perdición.

"Cómo el hombre puede atribuirse toda la vida de Cristo", Revelación de Santa Matilde de Hackeborn.
Nuestro Señor Jesucristo nos ofrece su vida sobre la tierra de muy buena gana, que la tomemos y suplamos por lo que nos falta, nuestros méritos son nada. Pero, si unimos nuestros deseos, intenciones y oraciones a sus oraciones e intenciones, por los méritos infinitos de Jesucristo toda oración ofrecida a Dios llega al cielo, aunque toda oración llega al cielo, no tiene el mismo valor, si no es unida con la de Cristo. También debemos realizar todos nuestros trabajos y acciones en unión de los trabajos y acciones del Divino Jesús.
Con Cristo podemos llegar al cielo, sin Él nos espera la más profunda desesperación en el infierno, por carecer de Él en nuestras almas, Dios mismo, uno con el Padre, en el Espíritu Santo.

"Que Santa María Magdalena Puede Conseguirle la Penitencia", Santa Matilde de Hackeborn.
Todo aquél que quiera dar gracias a Dios por las lágrimas de amor y arrepentimiento que derramó María Magdalena a los pies del señor, lavándolos con sus manos y secándolos con sus cabellos, y al mismo tiempo pide las lágrimas de una penitencia o arrepentimiento sincero y la infusión del divino amor, nuestro bondadosísimo Señor le concederá estas gracias por los méritos de Santa María Magdalena. Nuestro Señor ha prometido a Santa María Magdalena que perdonará a esa persona todos sus pecados antes de su muerte y le hará avanzar en su amor. ¡Afortunado por siempre el que así lo sienta y lo haga!.
Porque hay grandes pecadores que nunca hacen caso de las personas que quieren su salvación eterna, siguen pecando más y más, endurecen su corazón, y el demonio se apodera de sus almas, a tal punto que no les permite tener ese arrepentimiento sincero que nuestro Señor demanda para acogerlos con su perdón y su …More

"Ascendió a los Cielos, y se Sentó a la Diestra de Dios Padre Omnipotente", Artículo 6 del Credo de los Apóstoles, comentado por San Tomás de Aquino.
Nuestro Señor Jesucristo ascendió a los cielos por propio poder a los cuarenta días de su Resurrección y se sentó a la diestra de Dios Padre en igualdad, con la misma adoración y gloria.
Nuestro Señor Jesucristo de Dios había salido y a Dios volvía, siendo una sola cosa con Dios Padre no pueden estar separados. Cristo asciende al cielo victorioso, después de haber vencido al diablo, con su sacrificio redentor nos reconcilia con el Padre celestial, nos abre las puertas del cielo que permanecían cerradas por causa del pecado original, nos conduce al cielo, nos guía, nos da vida eterna. En adelante todos los que crean en Dios y en su Cristo y hagan su santa voluntad podrán ir al reino eterno de Dios, el hombre podrá ir al cielo en seguimiento del Cristo Redentor, tomando su cruz e imitando en todo a su Señor. El cristiano podrá orar y encomendarse …More

"Desgracias que caerán sobre el que no se confiesa", del Pbro. José M. Villaseca.
Nuestro Señor Jesucristo instituyó los santos sacramentos en su santa iglesia para que los pecadores se reconciliaran con Él y así fluyera la gracia divina sobre ellos y se santificaran, para que después de vivir en la tierra pudieran ir al cielo. En el sacramento de la confesión el pecador confiesa sus pecados a un sacerdote que representa a nuestro Señor Jesucristo y recibe la absolución de sus pecados y la purificación de su alma por la preciosa sangre de Cristo. El que así lo hace, como lo pide nuestro Señor, tendrá vida eterna al aprovechar la sangre derramada por Cristo en beneficio de todo el género humano. El que no se confiesa o que se resiste a la confesión de los pecados con el sacerdote desperdicia la sangre de Cristo y sufre varias desgracias que lo alejan de Dios y lo conducen al infierno.
Para ver el video, de la obra: Confesión o Condenación, capítulo V: "Desgracias que caerán sobre el …More

"Desgracias que caerán sobre el que no se confiesa", por el Pbro. Jośe M. Villaseca.
Penas, aflicciones y desgracias que irremisiblemente caerán sobre el que no se confiesa:
1.- Dios comienza a abandonarlo
2.- Dios le niega la providencia especial que tenía de él
3.- Dios permite que caiga sobre él la ceguedad del entendimiento
4.- Dios lo entrega al poder del demonio
5.- Dios le quita su divina ayuda
Para leer el e-book, imprimir o descargar el archivo pdf, de la obra: Confesión o Condenación, capítulo V: "Desgracias que caerán sobre el que no se confiesa", del Pbro. Jośe M. Villaseca dar clik en el siguiente enlace de Texto en Gloria.tv: "Desgracias que caerán sobre el que no se confiesa", por el Pbro. José M. Villaseca.

"De la purificación de María, Santa Anna, etc.", Revelaciones de Santa Matilde de Hackeborn.
El pequeño Niño Jesús fue presentado en el templo y su muy feliz Madre María lo vistió deliciosamente, desde su nacimiento deseaba ofrecerlo a Dios Padre, como la ostia muy agradable que sólo hizo aceptar por Dios todas las ostias ofrecidas desde el comienzo del mundo. La devoción con que María hizo la presentación de su Divino Hijo a Dios Padre fue muy grande, superior a la de todos los santos juntos. Además del cuidado con que la Virgen Madre lo vistió, el pequeño Jesús iba preparado con adornos celestiales, solamente visibles para Dios, sus santos, sus ángeles, su santísima Madre y la vidente santa Matilde. Dichos adornos eran de acuerdo con su dignidad de Hijo Único de Dios y con la misión de salvación por la que Dios lo había enviado a la tierra. Aparece santa Ana y el anciano Simeón como fieles servidores del Altísimo, felices de saber que Dios ya había cumplido su promesa de enviar a su …More

"Como el hombre solo abandona su cuerpo", Revelaciones de Santa Matilde de Hackeborn.
Creer en nuestro Señor Jesús, pedirle perdón de corazón por nuestros pecados y encomendar nuestro espíritu a Él en la hora de nuestra muerte basta para que Él considere nuestra alma como de su propiedad y defienda nuestra salvación como a su propia gloria. Creer en Jesucristo salva, por su preciosísima sangre derramada nos libra de la horrible miseria del infierno. Pero, no solo basta creer en nuestro Señor Jesucristo para merecer el cielo inmediatamente, después de la muerte, si no buscamos la purificación de nuestras almas con la sangre de Cristo, frecuentando los sacramentos y haciendo penitencia en vida.
Porque el hombre justo en vida se preocupó de agradar a Dios y hacer su santa voluntad, de oír misa frecuentemente, de frecuentar los sacramentos, de hacer penitencia por sus pecados, de tener caridad con los pobres pecadores y con las almas de los difuntos, por todo ésto es liberado de todo pecado …More

"Del infierno y del purgatorio", Revelaciones de Santa Matilde de Hackeborn.
Dios quiere que todos los hombres se salven y nos da los medios suficientes para hacerlo.
Bienaventurados aquellos que cumplen la voluntad del Padre celestial, para ellos es el reino de los cielos prometido por nuestro Señor Jesucristo.
Desdichados aquellos que no cumplen los 10 Mandamientos de Dios, se olvidan de Él y no aman al prójimo como nuestro señor Jesús lo pide, para ellos es el tan temido infierno de los condenados. Muchos santos católicos y almas elegidas por Dios han tenido la revelación del horror infinito del infierno. No podemos dudar que vivir sin Dios es el infierno, el olvido de Dios, la desesperación, el llanto, el morir con el mal y quedarse en la maldad por siempre. Por esta razón dos condenados en el infierno se odian atrozmente, si tienen la desgracia de chocar uno con el otro manifiestan ese odio entre ellos peleando, despedazándose, si se olvidaron de Dios y de que tenían almas que salvar …More

"De la resurrección futura", Revelaciones de Santa Matilde de Hackeborn.
Santa Matilde de Hackeborn recibía importantes revelaciones sobre la vida futura de los gloriosos resucitados en el cielo. Ella alababa y daba gracias a Dios por la resurrección y glorificación futura. En cuando nuestro Señor le daba visiones de como resucitarán los justos y su gran alegría por causa de haberse mantenido en la virtud y las buenas obras. Santa Matilde no se limitaba a observar detenidamente las visiones, sino que hacía preguntas a nuestro Señor para ser iluminada por Él en los divinos misterios.

"Del alma de una pequeña niña", Revelaciones de Santa Matilde de Hackeborn..
La futura madre pensó en consagrar a Dios a su hijo desde que lo tenía en su vientre, haciendo el voto de que si le daba una niña lo desposaría cuando fuera grande, dedicando su vida a Jesucristo y desposándose con Él como religiosa con votos sagrados. Llegó el feliz día de darlo a luz y Dios le concedió que naciera una niña. Pero la dichosa madre jamás pensó en los designios divinos y los grandes beneficios que Dios otorgaría al alma de la criatura por esa consagración y por su bautismo de pequeña. Dios es liberalísimo con las almas que le son consagradas aún desde el vientre materno, puede hacer efectivos, para una recompensa eterna, todos los bienes que una amorosa madre desea para su pequeña hija.

"La Oración, Cuarto Fundamento de la Vida Cristiana". San Juan Eudes.
La oración es una elevación respetuosa y amorosa de nuestro espíritu y de nuestro corazón a Dios. Es un dulce entretenimiento, una santa comunicación y una divina conversación del alma cristiana con su Dios, en la que le considera y contempla en sus divinas perfecciones, en sus misterios y en sus obras; le adora, le bendice, le ama, le glorifica, se entrega a Él, se humilla ante Él a la vista de sus pecados e ingratitudes, le suplica que tenga con él misericordia, aprende a hacerse semejante a Él imitando sus divinas virtudes y perfecciones; y, en fin, le pide cuanto necesita para servirle y amarle.
La oración es la felicidad perfecta, la dicha soberana y el verdadero paraíso que cabe en la tierra; toda vez que por este divino ejercicio el alma cristiana se une a Dios, que es su centro, su fin y su soberano bien. En la oración el alma posee a Dios y es de Él poseída; en ella le da cuenta de sus deberes, le rinde sus …More